Tus ‘muelas del juicio’ a juicio

¿Sientes que las muelas del juicio te están haciendo perder el juicio? ¡No te preocupes! Te traemos toda la información que necesitas para conocerlas a fondo y saber cómo actuar, sigue leyendo 😉

Muchas veces habrás escuchado hablar o incluso sufrido a las muelas del juicio. Pero, ¿qué sabes realmente sobre ellas? Continua leyendo y descubrirás el por qué de su nombre o a qué se debe su mala fama. Spoiler, no te asustes porque son solo unas muelas 😉

¿Qué son y por qué se llaman así?

Las muelas del juicio, son los terceros molares. Las podemos encontrar tanto en la parte de arriba como en la de abajo de nuestra dentadura y se ubican en la parte posterior de la boca. Por norma general, las muelas del juicio suelen salir alrededor de los 17 y 25 años. Aunque puede que en tu caso no salgan nunca, ya que es una posibilidad muy común. Además, reciben este nombre por considerarse que durante este periodo la persona pasa a edad adulta y se impone la madurez, sensatez y ‘el juicio’.

¿Por qué generan dolor?

Es muy común que en algún momento de tu vida, las muelas del juicio te den algún problema. Por lo general, el dolor de las muelas del juicio puede venir derivado de diferentes causas:

  • Falta de espacio. En el momento de erupción de la muela, esta puede no encontrar el espacio que necesita ya que está al final de la boca. Ello puede generar dolor y presión. Si quieres descubrir un poco más sobre la evolución de la mandíbula pincha aquí.
  • Pericoronaritis. En algunos casos, en el proceso de erupción, puede crearse una infección por el crecimiento de bacterias debajo de la mucosa. Esto desencadenará un dolor intenso de la muela, inflamación, enrojecimiento de la mucosa o, incluso, salida de pus por la infección.
  • Caries. Una vez ya han salido las muelas del juicio es muy común la caries al no poder realizar una higiene bucodental correcta.

Consejos para evitar el dolor

El dolor de las muelas del juicio, en algunos casos, puede llegar a ser tan intenso que creerás que pierdes el juicio 😉 Pero no te preocupes porque a continuación te damos algunos consejos para reducir puntualmente ese dolor:

  1. Colocar calor o frío en la zona. El cambio de temperatura te calmará durante un rato el dolor en la zona.
  2. Limpieza bucal exhaustiva. Para evitar que los alimentos se queden atrapados al final de tu boca realiza una limpieza más profunda. Así evitarás infecciones.
  3. Enjuague con agua caliente y sal. Podrás evitar la sensación de dolor e hinchazón con este colutorio casero.

Recuerda, estos son consejos para evitar puntual y temporalmente el dolor. Lo más importante es que cuando aparezca pidas cita con tu dentista y acudas cuanto antes a la clínica. En manos de profesionales el dolor desaparecerá de forma segura y para siempre.

Gadir Dental, más de 10 años cuidando sonrisas 🙂

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